Meir Lobaton nos ha enviado información correspondiente a su diseño de la Torre Cuajimalpa, un conjunto residencial en altura para ciudad de México. El proyecto ya ha sido publicado en diferentes medios de arquitectura, sin embargo una de las grandes dudas que suscitó estuvo relacionada a como solucionar estructuralmente el peso de los árboles en los balcones. A continuación publicamos el proyecto con un material extra en el cual se muestra entre otras cosas como se soluciona esta situación.
Descripción del proyecto:
El emplazamiento de este proyecto resulta de la división de un predio más grande que fraccionado por la frontera estatal, de un lado pertenece al Estado de México y del otro al Distrito Federal. El proyecto surge de la premisa de repensar la configuración tipológica de la torre residencial y encontrar un equilibrio entre el deseo de tener una casa independiente y la presión del costo del suelo; la respuesta es un rascacielos que al incorporar espacios verdes en cada nivel no solo recrea la vivencia de una casa sola, sino que rompe con la dicotomía entre tierra y edificio.
Cada nivel esta ocupado por un apartamento de 400 metros cuadrados interiores más una extensión jardinada de aproximadamente 160 metros cuadrados. Las plantas de los apartamentos rotan 90 grados con respecto al nivel inferior de tal forma que los jardines volados alojan las recamaras bajo ellos. El arreglo helicoidal que adquiera la torre gracias al apilamiento de los apartamentos girados, permite que las áreas verdes tengan una altura de tres niveles, maximizando la penetración de luz en los espacios interiores y permitiendo la existencia de árboles. La jerarquía del jardín adquiere tal importancia en el esquema que todos los espacios sociales interiores de los apartamentos están dispuestos de tal manera que tienen relación con el.
Los departamentos fueron rotados en 90º piso a piso, permitiendo así dar espacio a los jardines. Esta permanente rotación permite alturas libres de hasta triple altura, maximizando la entrada de luz a los espacios interiores.
Debido a la impredecible actividad sísmica que caracteriza a Ciudad de México se pensó en un sistema integrado de muros arriostrados que están diseñados para soportar movimientos laterales y a estabilizar la estructura. Un sistema Vierendeel que se desprende de la estructura principal permite soportar las habitaciones con los jardines arriba. Los casi 4 metros de piso a piso permiten la integración de los maceteros de 1,5 metros que permiten árboles que salen en voladizo sobre el estudio y las habitaciones del departamento de abajo.
Arquitectos: Meir Lobaton Corona + Kristjan Donaldson Ubicación: Estado de México, México Programa: Torre residencial de 36 niveles Área: 25,000 mt Colaboradores: Javier Sepulveda Consultores: García Jarque Ingenieros, SC., Buro Happold Consulting Engineers P.C. Fecha: Julio 2008 – Marzo 2009 Fecha de terminación de obra programada: Diciembre 2011 ambientación: a-04 studio digital
